Argumento
¿Cuál es el verdadero rostro del amor? Ricardo ve cumplido, a una edad muy temprana, el sueño que en su Lima natal alimentó desde que tenía uso de razón: vivir en París. Pero el rencuentro con un amor de adolescencia lo cambiará todo. La joven, inconformista, aventurera, pragmática e inquieta, lo arrastrará fuera del pequeño mundo de sus ambiciones. Testigos de épocas convulsas y florecientes en ciudades como Lima en los 50, París en los 60, Londres y Tokio en los 70, Madrid en los 80, que aquí son mucho más que escenarios, ambos personajes verán sus vidas entrelazarse sin llegar a coincidir del todo. Sin embargo, esta danza de encuentros y desencuentros hará crecer la intensidad del relato página a página hasta propiciar una verdadera fusión del lector con el universo emocional de los protagonistas. Creando una admirable tensión entre lo cómico y lo trágico, Mario Vargas Llosa juega con la realidad y la ficción para liberar una historia en la que el amor se nos muestra indefinible, dueño de mil caras, como la niña mala. Pasión y distancia, azar y destino, dolor y seducción... ¿Cuál es el verdadero rostro del amor?
Opinión
Opinión
Vargas Llosa deja ver entre líneas algo que es, digamos, distinto al amor. Hay quién lo llama entrega. Lo he leído en un par de días y me ha encantado, por esa relación a través de los años, las "formas" de amar de cada uno de los personajes que van apareciendo a lo largo de la novela.
Cada uno de los personajes encarna lo que dice su apodo: Ricardo (el niño bueno) es eso, un niño bueno, un hombre de bien, trabajador, ordenado, que ama con generosidad y entrega, que perdona una y otra vez. La niña mala es una mujer egoísta, calculadora, que busca el dinero fácil, que engaña para conseguir lo que quiere y menosprecia el amor. ¿Cómo hacer coincidir a estos personajes? Pues él será siempre el que da y pierde, y ella la que toma y gana. Unas veces dan ganas de zarandear a este personaje, o de abrazarlo, quizá, porque después de todo resulta entrañable de puro noble.
Casi toda la vida de él transcurre en París, la ciudad donde siempre quiso vivir, excepto cortos periodos de tiempo en los que, por su trabajo de intérprete, reside en otros países. La novela se hace muy amena porque Vargas Llosa describe muy bien los lugares por dónde va transcurriendo la historia y va presentando personajes que luego una vez cumplen su parte en la historia desaparecen. Se dice que hay muchos recuerdos atrapados en esta novela. Nos describe muchos rincones de París, del Londres de la revolución hippy y las carreras de caballos, del Madrid y el castizo barrio de Lavapiés... también incluye personajes que entran y salen de la vida de Ricardo cada uno con su historia como Paul el guerrillero, el retratista de caballos y paisano suyo, Salomón Toledano el “Trujimán”, Arquímedes el hombre que sólo con mirar el mar sabía donde se podía construir un rompeolas, o Yilal, el niño sin voz que mudo no es y Marcela ese viento fresco que entró en su vida.
Puede parecer una historia triste, pero también hay una parte del libro de grandes esperanzas: Ricardo va a vivir a París, comienza a trabajar, estudia y se perfecciona en su trabajo, en Perú se vive la fiebre revolucionaria que provoca la revolución cubana, su amigo se va a hacerela revolución . Ricardo tiene amigos y perspectivas.
A partir de ahí todo va en franca decadencia: la revolución fracasa, la niña mala le rompe el corazón una y otra vez, algunos amigos mueren.... Luego vienen las deudas, la enfermedad, el cansancio. De la promesa de felicidad apenas queda nada, o tal vez sí, la niña mala le demuestra muy al final que lo ha querido a su manera.
Todo escrito con un estilo sencillo e impecable.
Cada uno de los personajes encarna lo que dice su apodo: Ricardo (el niño bueno) es eso, un niño bueno, un hombre de bien, trabajador, ordenado, que ama con generosidad y entrega, que perdona una y otra vez. La niña mala es una mujer egoísta, calculadora, que busca el dinero fácil, que engaña para conseguir lo que quiere y menosprecia el amor. ¿Cómo hacer coincidir a estos personajes? Pues él será siempre el que da y pierde, y ella la que toma y gana. Unas veces dan ganas de zarandear a este personaje, o de abrazarlo, quizá, porque después de todo resulta entrañable de puro noble.
Casi toda la vida de él transcurre en París, la ciudad donde siempre quiso vivir, excepto cortos periodos de tiempo en los que, por su trabajo de intérprete, reside en otros países. La novela se hace muy amena porque Vargas Llosa describe muy bien los lugares por dónde va transcurriendo la historia y va presentando personajes que luego una vez cumplen su parte en la historia desaparecen. Se dice que hay muchos recuerdos atrapados en esta novela. Nos describe muchos rincones de París, del Londres de la revolución hippy y las carreras de caballos, del Madrid y el castizo barrio de Lavapiés... también incluye personajes que entran y salen de la vida de Ricardo cada uno con su historia como Paul el guerrillero, el retratista de caballos y paisano suyo, Salomón Toledano el “Trujimán”, Arquímedes el hombre que sólo con mirar el mar sabía donde se podía construir un rompeolas, o Yilal, el niño sin voz que mudo no es y Marcela ese viento fresco que entró en su vida.
Puede parecer una historia triste, pero también hay una parte del libro de grandes esperanzas: Ricardo va a vivir a París, comienza a trabajar, estudia y se perfecciona en su trabajo, en Perú se vive la fiebre revolucionaria que provoca la revolución cubana, su amigo se va a hacerela revolución . Ricardo tiene amigos y perspectivas.
A partir de ahí todo va en franca decadencia: la revolución fracasa, la niña mala le rompe el corazón una y otra vez, algunos amigos mueren.... Luego vienen las deudas, la enfermedad, el cansancio. De la promesa de felicidad apenas queda nada, o tal vez sí, la niña mala le demuestra muy al final que lo ha querido a su manera.
Todo escrito con un estilo sencillo e impecable.
No lo he leído todavía, está en espera. Pero no recuerdo ninguno de los libros de Vargas LLosa que pueda decir no me ha gustado.
ResponderEliminarCon todos he difrutado, y me encanta que sea un Nobel, creo que en este caso es muy merecido.
Un besote.
Ely, esta novela no es tan densa como otras, pero tiene tanta pasión, tanto amor unas veces correspondido y otras no, y los personajes van apareciendo a poquito a poco en distintos lugares a los que nos lleva de la mano. Yo también me alegro mucho de que sea Premio Nobel, es un gran escritor.
ResponderEliminarBesines
L;)
Y sí, es de lectura más fácil que otras novelas suyas. Novela más ligera. Yo recuerdo que lo disfruté, y que lo leí en Asturias un verano... pero poco más. Me viene alguna "imagen", pero su huella no ha perdurado en mi caso. Sí sé que lo pasé bien leyéndolo, pero no recuerdo mucho más.
ResponderEliminarBesos.
María.
Loli, me gustan tus reseñas. No puedo decir más. De MVLL me quedé alucinado con "conversaciones en la catedral".
ResponderEliminarChiquilla!! Qué reseña tan buena y bonita!!! Como par resistirse... Anoto, anoto.
ResponderEliminarUn beso,
Por cierto, sigo teniendo problemas con tu blog, que no se me actualiza...
María, lo importante es que en su momento la difrutaste, quizá no sea la obra más importante ni la más densa pero a mí me atrapó.
ResponderEliminarUn abrazo muy grand, para la mama también.
Ximens, me han recomendado mucho "Conversaciones en la catedral" lo tengo pendiente. Me gusta verte por aquí!!!
B7s
Carmen, creo que te puede gustar, hoy en el club de lectura la hemos analizado, y no es sólo la historia en sí que cuenta, es lo que provoca, la curiosidad por ciertos lugares, los guiños que hace el autor y montones de detalles que hacen que quieras saber más.
Besines
A mí me ha recordado un poco a Forrest Gump en tu descripción de él y en la de la chica mala. Jenny también quiso a su manera a Forrest y también fue una chica mala.
ResponderEliminarNo he leido nada de Vargas Llosa. Tal vez este sea el comienzo de una gran amistad...
Besitos