jueves, 30 de septiembre de 2010

Soñar con ventanas




Soñar con ventanas significa grandes esperanzas y posibilidades.

Soñar que mira por una ventana hacia fuera simboliza su actitud hacia la vida, su intuición, su opinión. Tal vez está reflexionando sobre una decisión y busca algún tipo de ayuda. Tal vez necesita viajar y ver mundo, para adquirir experiencia.

Soñar que mira por la ventana hacia dentro, significa que últimamente se ha estado preguntando sobre sus sentimientos o comportamiento.

Siempre es bueno soñar...
Aunque sea con ventanas!!

domingo, 26 de septiembre de 2010

Garriga Vela y los libros(Publicado en Sur, Cruce de Vias, 26-09-2010)


El tiempo y los libros



Me atraen los mares, los desiertos, los lugares donde la vista se pierde en el horizonte. Sin embargo, mi casa no tiene ni un rincón vacío. Los libros cubren las estanterías y se amontonan alrededor y encima de los muebles. Ya sé que los podría comprimir en un artefacto del tamaño de media cuartilla, pero necesito verlos constantemente aunque sólo sea de soslayo. Mi lugar de trabajo es el comedor. Paso el día entre libros en lugar de personas. Miro el lomo de los libros como si fuera el perfil de los amigos. Una compañía tranquila, fiel y silenciosa. Miro a Carver, Coetzee, Cheever, Conrad, que están a la izquierda del sofá ordenados alfabéticamente por autores extranjeros, y su presencia me evoca momentos felices.

La relación que guardo con los libros es similar a la que mantengo con esos viejos amigos que sólo veo de vez en cuando pero que al volver a encontrarnos enseguida recuperamos la antigua complicidad. Me gusta pasear entre los libros. No podría encerrarlos en un sitio tan frío e impersonal como un 'e-book'. Un libro electrónico no posee papel, ni perfume, ni notas escritas a mano ni entradas de cine ni billetes de viajes ocultos entre sus páginas. Un 'e-book' sería como poner una foto del mar o del desierto delante de mi terraza. El paso del tiempo y la aventura de vivir que se reflejan en los libros no admiten decoraciones.

Pertenezco a otra época y a una clase de personas que necesitan a su lado la presencia de los objetos queridos. Creo que lo que no vemos lo acabamos olvidando. Trasladar mis libros a un 'e-book' sería como recluirlos en una residencia que poco a poco iría dejando de visitar. El desierto está fuera, igual que los océanos y el cielo infinito; sin embargo su alma es como un libro cerrado que desea caer en manos de algún lector.

Ya sé que todo el saber del mundo cabe en esos aparatos electrónicos que ocupan una miseria, pero yo soy fetichista y necesito acariciar el objeto de deseo y sentir el tacto del papel. Amo los libros y me resulta hermoso el natural deterioro que va produciendo la edad. Mis libros tienen escrito en la primera página mi nombre y la fecha en la que nos conocimos. Los más viejos guardan impresa la letra del niño que fui. El tiempo y los libros. No sería capaz de abandonarlos. No renuncio a ninguno. Los miro y me sonríen. Existe entre nosotros una secreta complicidad.

He de confesar que me atormenta una pesadilla: tengo la sensación de que vivo encerrado en un mundo de papel y que fuera hay alguien que tiene la facultad de encenderme y apagarme como si yo fuera un 'e-book'. Entonces me invade el inquietante temor de que ese ser, desalmado y poderoso, me desplace a cualquier rincón y me olvide para siempre.


JOSÉ ANTONIO GARRIGA VELA

viernes, 24 de septiembre de 2010

Algunos de mis libros




A mi madre se le reproducen las plantas y las macetas. A mí los libros. Me gustan tanto que parece que tenga un imán que me los atrae hacia mi. Si regalo uno, luego recibo tres.
He tenido épocas en que me ha gustado la novela histórica, luego las novelas de los grandes y después pasé al relato corto. Ahora intento escribir y aprender sin parar de leer.
De vez en cuando me gusta sumergirme en el mundo mágico y caótico de la poesía.
Y tenerlos todos a mano. No puedo evitar tener varios empezados a la vez y perderme por varias historias, cuentos, poemas...
Ahí tienen su nueva casa. Quiero hacer un listado de todos los que tengo, de todos los que están y son. Intentar ponerlos por temas, por grupos y luego poder encontrarlos cuando los busque... ¿Será posible?

lunes, 20 de septiembre de 2010

Cosas que me gustan: postales, piedras, libretas...


Este cuaderno "con ojos" me lo trajo mi amigo Pedro Rojano, de su viaje a Nepal. Bueno uno a mí y a cada uno de nuestro grupo escritura Punto y Seguido, en diferentes colores. Durante los días que estuvo de viaje, nos enviaba una crónica detallada de sus aventuras. Era emocionante encontrar en la bandeja de correo un mensaje suyo y empezar a leer, a ver, a sentir a través de sus palabras tantas cosas nuevas. Yo nunca he estado allí, pero de alguna manera ya estuve.

Me lo imaginaba como un miembro de la Comunidad del anillo, "Al cruzar el paso de Thorung a falta de dos días para llegar a Jomsom y que se encuentra a 5.410 metros de altura."… os copio un fragmento sólo para que os hagáis una idea:

“Pero cuando comienzas a caminar y las jornadas se van convirtiendo en
horas de dura ascensión; cuando el monzón te ignora lanzando su furia
sobre los campos de arroz, sobre los pueblos, sobre nuestras cabezas
cubiertas por el chubasquero; cuando las botas comienzan a clavarse en
el barro… entonces comienzas a convertir aquellas cifras en verdaderos
hitos cuyo alcance será toda una meta que nos hará más grandes.
El sendero atraviesa paisajes increíbles de frondosa vegetación junto
a un río de color horchata por los sedimentos que transporta y cuyas
aguas desesperadas se rompen aquí y allá en remolinos altísimos, junto
a él se elevan las montañas por las que transcurrimos. Por ellas
descienden elevadas cascadas que dejan caer el polvo de agua sobre el
lecho del río. Cruzamos sobre puentes colgantes de hilos de acero y
nos adentramos cada vez más en una tierra desconocida, en los dominios
de la naturaleza. Cada hora, aproximadamente, el sendero atraviesa un
pueblito nepalí con casas de madera ennegrecida y piedra”

Y la piedra la encontré un día de resaca de mar en la orilla. Creo que es una piedra viajera como Pedro. Y parece una pequeña luna.

Para quién quiera leer más y más y viajar desde el sofá de su casa aquí copio el enlace del blog de Pedro:

http://pedrorojano.blogspot.com/

viernes, 17 de septiembre de 2010

Poesía en el Picaso: Isabel Bono


Pues sí. Leyó delante de él, y frente a una sala abarrotada.
Poemas de hace años y de ahora. Poemas vestidos y en los huesos.
La presentó Juan Pardo Vidal, nos habló de sus libros, de sus blogs, de sus poemas...
Isabel dice que siente nostalgia no de la infancia, sino del presente, que se escapa sin remedio. Y del futuro, porque en él ocurriran muchas cosas que tendrá que perderse.
Recitó casi durante una hora que apenas parecieron minutos.
No encuentro sus libros. Estan agotados. Pero me dijeron que traerían más.
Luego compartimos una copa de vino de Mollina, entre amigas.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Cosas que me gustan: viajar


Mi nevera también sueña con viajar por esas ciudades del mundo de sus imanes. Me ha dicho que porqué no nos vamos las dos juntas a Berlín, Dublín, Venecia, Praga, Londres y todas esas ciudades de las que tanto hemos leído y escuchado hablar.
Le digo que bueno, que miro los vuelos y las salidas y algún albergue para quedarnos.
Ya tiene la maleta preparada, se ha comprado una peluca rubia y unas zapatillas de deporte.
Mi familia dice que estamos locas, que dónde vamos las dos solas.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Cosas que me gustan: postales,ciudades, piedras y libros...III


Esta postal me la trajo mi amiga Inmaculada Reina en el mes de febrero, de Venecia.

Le he puesto un sendero de piedras de la mano, y le pisé un pie sin querer al "Arlecchino della commedia dll´arte" (espero que no le duela).
Venecia... es una de las ciudades que deseo visitar desde hace mucho tiempo.
Aunque parezca que he estado allí mil veces, mientras leía "Muerte en Venecia" y otros libros. Siento que ya he paseado en góndola por sus canales, visitado en la noche sus palacetes, deambulado por sus calles de agua dentro de una góndola...
Porque hay ciudades para vivir, cómo Málaga. Llenas de luz, de amigos, de olor a mar...
Y ciudades para visitar y no olvidar, como es el caso de Venecia.

Poste restante


Hola Martín: Aquí estoy en la terraza, sola, frente a la costa. No hay viento, el mar está quieto. Una confesión: la soledad ha dejado de herirme. Mejor aún: me permite revisar, casi diría descifrar, mi pasado sin gracia. En un platillo de la balanza coloco mis odios; en el otro, mis amores. Y he llegado a la conclusión de que las cicatrices enseñan; las caricias, también.

Poste restante, Mario Benedetti

domingo, 12 de septiembre de 2010

Cosas que me gustan: árboles, piedras y libros


A veces pienso en hacer una lista con lo que más me gusta: personas, piedras, libros, escribir, cuadernos, postales, boligrafos, recuerdos... (el orden no es aleatorio). Empezaré con la postal del árbol que me trajo mi amigo Miguel de Londres y alguna de las piedras que encuentro en la orilla del mar, los libros que tengo leídos, a medio leer, o en espera.

Listado:

1. Leer bajo un árbol sentada sobre una piedra, (a ser posible con un cojín).

(El libro que hay debajo de la postal es “Nada” de Carmen Laforet)

Me encanta el blog de Isabel Bono "Esa piedra me ha llamado por mi nombre" (de ahí me inspiré...)