lunes, 23 de agosto de 2010




"La lluvia, siempre exuberante aunque fuese un simple calabobos, le parecía romántica por eso: porque emparentaba con el oscurecer, con el llorar, con el no tener que saludar a nadie conocido, con el punto más alto siempre de un concierto, donde las lágrimas se saltan sin consentir nadie en el mal gusto de fijarse unos en otros, arrebatados y purificados por la emoción sublime, lo mismo que la lluvia..."

Del libro Una ventana al norte, de Alvaro Pombo.

Esta tarde estaba en la playa, frente a las olas que iban y venian. Viendo como atardecía y el cielo iba cambiando de tonalidades, mientras la luna casi llena sonreía desde el cielo casi transparente. Leía este libro, pero mi mente, mis pensamientos escaban lejos, muy lejos...

3 comentarios:

  1. Yo también estaré leyendo cerca del mar en estos días, y también creo que estaré lejos, muy lejos. Es lo normal, digo yo.

    Un besazo, bella.

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  2. Vivo cerca del mar, pero pocas veces puedo verlo, no importa, lo llevo dentro.

    Un besote, amiga

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  3. Loli, siempre me descubres autores y lecturas que si no es por ti no se cruzarían en mi camino. Muchas gracias por esto y sobre todo por tu gran sensibilidad. Qué ganas tengo de verte y darte un abrazo. ESpero que sea esta semana.

    Besitos y no dejes de escribir este blog tan fantástico

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